jueves, 22 de noviembre de 2007

TRANSFORMAR UN MOTOR NORMAL A UNO QUE ADMITA GAS NATURAL

Los productores de coches y los especialistas en transformar un motor normal en uno que admita gas natural trabajan, sobre todo, en utilitarios y vehículos de transporte medios, así como en Autocares urbanos y los destinados a cubrir distancias medias. Es decir, aquellos en los que la autonomía no es determinante. Los automóviles como turismos o monovolúmenes pueden tener una autonomía de 180 kms a 250 kms, cargando 80 litros de gas comprimido.

Argentina es uno de los países con mayor parque de vehículos de gas natural: 400.000 unidades. Le siguen Italia con 290.000 y Rusia con 200.000. Otros países de la unión europea se quedan más atrás. Por ejemplo Alemania que contaba con 3.500 unidades en 1998.

El gas natural es un combustible que, debido a su poca reactividad, se puede utilizar perfectamente en motores de Otto. Su composición es, según la región, de un 85% a 97% de metano. El metano es un compuesto químicamente muy estable; no es tóxico, es inodoro (aunque se trata con elementos olorosos para detectar fugas) y contiene pocos enlaces carbono hidrógeno (HC) cancerígenos. Debido a que las temperaturas máximas alcanzadas en las cámaras de combustión son inferiores que durante la combustión del Diesel y la gasolina, las emisiones de óxidos de nitrógeno son menores. La emisión de partículas sólidas también es menor.

A estas ventajas se unen la facilidad de su transporte, a través de gasoductos, y su almacenamiento. Debido a la estabilidad de sus componentes, el gas natural no representa ningún riesgo de catástrofe natural durante ambos procesos.

Además el refinado del gas natural transcurre sin que pierda su capacidad de combustión, en lo que aventaja a la gasolina e iguala al gasóleo. Solamente se trata de «secar» el gas en bruto y separar pequeñas cantidades de CO2 (Dióxido de carbono) y de SH2 (Sulfuro de hidrógeno). En este proceso la energía requerida es muy inferior a la de los otros combustibles. Supongamos que h = 1.0 significa que el proceso de refinado transcurre sin pérdida en la capacidad de combustión del producto. Así pues, el refinado de la gasolina concluye con h= 0.88 y el del gas natural y el Diesel con h= 0.91.

El precio del gas natural es muy bajo. El gas se compra en kilos y un kilo cuesta 84 ptas. Su valor en Ptas./litro sería de 56 Ptas./litro a la presión con que entra en el depósito.

Hay dos tipos de motor: bivalente y monovalente. El primero funciona con gas natural así como con gasolina. El motor original se mantiene intacto, pero se le añaden el depósito de gas con sus válvulas, sus conductos y el organizador de la mezcla. Todo esto controlado electrónicamente. Con este tipo de motor el conductor puede elegir en cualquier momento el tipo de combustible, apretando un botón del salpicadero. Este motor es una alternativa adecuada dada la deficiente red de repostaje de gas natural. Da de un 5% a un 10% menos de potencia que la gasolina, debido a que el volumen del gas es mayor y el llenado del cilindro es menor con respecto a la gasolina.

Este tipo de motor está específicamente concebido para funcionar con gas natural únicamente. De este modo, se puede aumentar la relación de compresión y mejorar notablemente la combustión y el rendimiento. Además este motor cuenta con cámaras de compresión especiales, válvulas adaptadas al tiempo de combustión del gas y un catalizador que se adapta al tipo de metano utilizado. El nivel de emisiones de este motor es aún más reducido que el del bivalente. El espacio utilizado por este motor es menor que el anterior, puesto que no se necesitan ni depósito de gasolina, ni bombas, ni filtros. El motor monovalente se suele utilizar en camiones y autobuses urbanos, destinados a hacer trayectos cortos, puesto que estos servicios disponen de una estación de repostaje central.

Hay dos formas de almacenar el gas: comprimido (CNG) o licuado (LNG). Comprimirlo es más práctico. El gas se almacena en bombonas con una presión de 200 bares. Este método es el más utilizado en vehículos para personas y transportes pequeños. Se utiliza una bombona de gas de 80 litros cuyo peso total es de 84 kg. También existen bombonas de aleaciones ligeras e incluso de varios plásticos. Licuado, se almacena a -162ºC en estado líquido. Este método no es muy práctico, puesto que el gas líquido es más pesado que el comprimido. Además los costes del aislamiento térmico del tanque son grandes.

Hay dos tipos de estaciones de repostaje: uno lento, para flotas de vehículos de gas natural, y por particulares. El tiempo de llenado es de 10 l de CNG/hora. Así un tanque de 80 litros tardará 8 horas. La compresión del gas en este procedimiento es mejor.

El otro es rápido, utilizado para estaciones de repostaje públicas. Durante este procedimiento el gas procedente de la estación se comprime con una presión de 250 bares en pequeños tanques dentro de la misma estación. De este modo pueden repostar varios coches a la vez. Este tipo de llenado puede ser llevado a cabo por cualquier persona por ser tan simple como echar gasolina. El repostaje dura pocos minutos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Eu recomendarei qualquer pessoa que esteja procurando empréstimo comercial para o Sr. Benjamin, que me ajudou com um empréstimo de quatro milhões de dólares para iniciar meu negócio e foi rápido. seguro. Foi definitivamente uma experiência positiva. Evite os golpistas aqui e entre em contato com o sr. Benjamin On. lfdsloans@outlook.com. WhatsApp ... +19893943740. se você estiver procurando por empréstimo comercial.